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Simplemente quiero que si lees esto, ya sabrás que es para ti, te separes del ordenador, inclines la vista hacia el techo y te pares a pensar en todo tan solo unos minutos. Quiero que empieces por recordar desde el principio, los primeros momentos, los más importantes, quiero que continúes pensando por el año nuevo que pensamos pasar juntos. Quiero que recuerdes todos y cada uno de los momentos que pasamos, las fechas, el lugar, todo lo que nos reímos juntos, lo bien que nos sentíamos. A pesar de todo lo que ha ocurrido, quisiera darte las gracias por pasar a mi lado todos esos momentos, por hacer que me durmiera cada noche pensando en lo inmensamente feliz que me hacías, darte las gracias hasta por las discusiones, que no fueron muchas pero gracias a ellas quizás nos unimos más. Quiero que sepas que este día lo recordaré siempre; te dije que lo haría y lo haré, siempre lo recordaré. Hoy, pensé que iba a ser un día de esos en los que prefieres ni levantar de la cama, que todo te parece mal y no tienes ganas de hacer nada pero no, hoy me he levantado con una sonrisa radiante, me he levantado con ánimos de hacer de todo, de divertirme, porque no voy a llorar por haberte perdido, voy a sonreír porque te conocí, porque pasé momentos muy bonitos junto a ti y porque sentí que de verdad quise a alguien. Quizás la única pena que me queda es que no pudiéramos llegar a más. Ahora, después de un año, te deseo de verdad que seas feliz y que encuentres a alguien que de verdad te haga sentir lo que hasta ahora nadie te ha hecho sentir. Desde el principio sabíamos que esta historia tendría su final lo que no sabíamos era cuándo llegaría. Ese final llegó hace tiempo pero hoy es oficialmente el final de esta historia, el final de verdad. Quisiera acabarla bien, con buen pie pues después de la tormenta viene la calma, así que te diré que te quise, te quiero y posiblemente estarás en mi recuerdo durante mucho tiempo.